VI. Danza macabra. (Mc 6, 14-29):

🔔🔔🔔¡¡¡Buenos días hermanos!!! Hoy San Marcos nos habla del trágico final de San Juan Bautista, y de un Rey buen Señor y un tirano que cree que la vida de sus súbditos le pertenecen. Hoy Mc 6, 14-29:

 

"En aquel tiempo, como (1)la fama de Jesús se había extendido, el rey Herodes oyó hablar de él. (2) Unos decían:Juan Bautista ha resucitado, y por eso los ángeles actúan en él. Otros decían: Es Elías.Otros: Es un profeta como los antiguos. Herodes, al oírlo, decía: (3)Es Juan, a quien yo decapité, que ha resucitado. Es que Herodes había mandado prender a Juan y lo había metido en la cárcel encadenado. El motivo era que Herodes se había casado con Herodías, mujer de su hermano Felipe, y Juan le decía que no le era lícito tener la mujer de su hermano. Herodías aborrecía a Juan y quería quitarlo de en medio; no acababa de conseguirlo, porque (4)Herodes respetaba a Juan, sabiendo que era un hombre honrado y santo, y lo defendía. En muchos asuntos seguía su parecer y lo escuchaba con gusto. La ocasión llegó cuando Herodes, por su cumpleaños, dio un banquete a sus magnates, a sus oficiales y a la gente principal de Galilea. La hija de Herodías entró y danzó, gustando mucho a Herodes y a los convidados.El rey le dijo a la joven: Pídeme lo que quieras, que te lo doy.Y le juró: Te daré lo que me pidas, aunque sea la mitad de mi reino.Ella salió a preguntarle a su madre: ¿Qué le pido? La madre le contestó: La cabeza de Juan el Bautista.Entró ella en seguida, a toda prisa, se acercó al rey y le pidió: Quiero que ahora mismo me des en una bandeja la cabeza de Juan el Bautista.El rey se puso muy triste; pero por el juramento y los convidados no quiso desairarla. En seguida le mandó a uno de su guardia que trajese la cabeza de Juan. Fue, lo decapitó en la cárcel, trajo la cabeza en una bandeja y se la entregó a la joven; la joven se la entregó a su madre. Al enterarse sus discípulos fueron a recoger el cadáver y lo enterraron."

 

(1) La fama de Jesucristo crece por sus milagros y Su doctrina y llega a palacio. Y es lo lógico en un pueblo que ansía un Mesías (aunque cada uno tenga una visión de Él: Rey político nacionalista, profeta, sacerdote o jinete del Apocalipsis...) ¡Pero todos esperan al Mesías! Y esta palabra está tan  contaminada que Jesucristo nunca la utilizará para sí y preferirá ser llamado "Hijo del hombre", sacado del profeta Daniel (7, 13y 14):

"

	13 Yo seguía contemplando en las visiones de la noche: Y he aquí que en las nubes del cielo venía como un Hijo de hombre. Se dirigió hacia el Anciano y fue llevado a su presencia.
14	A él se le dio imperio, honor y reino, y todos los pueblos, naciones y lenguas le sirvieron. Su imperio es un imperio eterno, que nunca pasará, y su reino no será destruido jamás.

... El drama de nuestra sociedad es que ya no espera al Mesías, y aún peor, el Mesías ha venido y lo ha ignorado o lo ha  transformado en un ídolo... ¡Sólo en nuestros corazones podrá volver a nacer el Mesías que intentan alejar de la vida pública y política!

 

(2) ¿San Juan Bautista ha resucitado? ¿Es Elías? ¿Es otro profeta? Curiosamente todos tenían parte de razón. San Juan Bautista, sin duda resucitó en la casa del Padre. Sabían que tenía que venir Elías para señalar al Mesías y vendrá junto a Moisés en la Transfiguración. Y Jesucristo era un profeta y mucho más: era el Profeta, y era el Hijo de Dios, y era Dios Encarnado que comienza Su redención desde su concepción en el seno de Santa María Virgen.

 

(3) Los remordimientos hacen que Herodes acepte la idea más difícil. Pero no le llevan a cambiar de vida. Sólo se queda recreándose en lo que ha hecho. ¡Un paso más le habría salvado! Dejar el pecado, ir a buscar a Jesús,... ¡Pero no! El primer paso es el más difícil de dar y el se queda prisionero en sus lujos, su poder y con la mujer de su hermano,...

 

(4) Herodes, reconocía la santidad de San Juan Bautista y en algunas cosas seguía su enseñanza. Y es que no hay nadie tan perdido incapaz de escuchar la voz de Dios en su interior, ni que no sepa distinguir el bien del mal, (al menos durante un instante)... Y todo es don de Dios: El que jamás ha pecado gravemente es por don de Dios, el que se convierte de una vida de pecado es también don de Dios, y si ambos perseveran y llegan a la santidad también será por don de Dios,... ¡Así que no nos cansemos de pedir siempre sus dones! ...

 

... ¡Cuántas personas hay que hacen el bien y viven dignamente y sin embargo no dan ese primer paso que sí les hará volver a Dios! Simplemente cambiando algunas pequeñas cosas (porque de verdad que son gente muy buena) y están sobre una tierra húmeda, pero incapaces de beber el agua del río de Dios que baja clara y pura muy cerca de ellos. (Los que venimos del desierto valoramos muchísimo Su agua y el don que nos hizo abrazar la conversión y salir de esa tierra estéril)...

 

...Y dejo que termine este mensaje por mí "el Santo Cura de Ars", San Juan María Vianney: "No ir a recibir la Comunión es como alguien muriendo de sed al lado de un manantial".

 

Mi oración hoy por todos aquellos que tengan la Santa paciencia de leer este mensaje. Para que el Señor les ayude a salir del gran desierto, o riegue los pequeños desiertos que todos tenemos, y que todos demos gracias a Dios por Sus regalos, ¡porque desde nuestro primer aliento de vida hasta ese primer paso todo es don de Dios! ¡Feliz día hermanos! ¡ Besos y abrazos DE COLORES!

Pd: Y no olvidéis nunca que cualquier semilla puede ser el origen de un bosque, (si Dios lo quiere).