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martes, 9 de diciembre de 2014

IX. Las ovejas pérdidas con que el pastor no deja de soñar. ... (Mt 18,12-14):

IX... + ¡¡Buenos días hermanos!! Este martes de la Segunda Semana de Adviento, nos espera el Evangelio de San Mateo:

" En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: «¿Qué os parece? Suponed que (1)un hombre tiene cien ovejas: si una se le pierde, (2)¿no deja las noventa y nueve en el monte y va en busca de la perdida? (3)Y si la encuentra, os aseguro que se alegra más por ella que por las noventa y nueve que no se habían extraviado. Lo mismo (4)vuestro Padre del cielo: no quiere que se pierda ni uno de estos pequeños»."

(1) Que se dé cuenta de que les falta esa oveja indica ya cuanto le preocupan sus ovejas. Sólo le falta una y ya se da cuenta y la echa de menos. No tiene ni que contarlas y se da cuenta de que una falta, porque su vacío no la puede llenar otra oveja (a la que seguro que también ama igual)...⌚... Eso me recuerda cuando alguien falta a una Ultreya ¡¡cuánto se le echa de menos!! Y sin querer el pensamiento va hacia ese hermano ¿Cómo estará? ¡Y con el pensamiento las oraciones! Y en la distancia, por un momento nos unimos en el corazón de Dios, pidiendo que Él le sostenga.

(2) Pero su Amor va más allá y deja todas las demás, arriesgándose a quedarse sin nada, y busca la oveja que se perdió... ¡Cuánto la ama!

(3) Y cuando la encuentra se llena de alegría con el reencuentro. Y no sólo no le recrimina si no que la abraza (como el abrazo del padre al hijo pródigo), ¡porque la alegría y el Amor no dejan sítio a los reproches! ¡Él sólo quería disfrutar de su amor y su compañía!

(4) Dios es ese pastor lleno de Amor. Que respeta nuestra libertad y a la vez no quiere que nadie se pierda. Y nos va a buscar una y otra vez. (Su Amor es tan grande que sólo puede salir a buscarnos, una y otra vez, sin descansar)... ⌚... Y cuándo por fin nos encuentra ¡se alegra!! Y nos perdona todos nuestros errores pasados (todos nuestros pecados) y lleno del Amor, que forma parte de Su esencia, nos dice como Jesús, a la pecadora: "ve y no peques más"... ¡Y cuando uno siente ese abrazo, y la PAX y el Amor, y la alegría, y la tranquilidad, sabe que ya no quiere estar en otro sítio!! ¡¡Sólo sueña con poder en su inmensa debilidad retener ese abrazo, y le pide a Dios que le siga sosteniendo!! Y da gracias porque Dios le haya perdonado a través de las manos de un sacerdote, en el único sítio en que uno puede ser perdonado: ¡En la Confesión! ...⌚... Pero ¿por qué la confesión? Porque el Señor así lo instituyó: "Al que perdonéis los pecados le serán perdonados" y allí les dio el don de perdonar pecados a los Apóstoles, que fueron imponiendo las manos a varios presbíteros y transmitiéndoles ese don, y esos sucesores siguen llamándose hoy presbíteros (aunque nosotros les llámemos curas)... Y lo mismo que no hay Bautismo sin agua (aunque sea el Papa quién se empeñe en usar otra sustancia), no hay perdón de los pecados si falta el elemento material: que es decir los pecados al sacerdote...⌚... Dicho lo cual, y ya que no somos ovejas y tenemos libertad e inteligencia, podemos usarlas para ir a dar un abrazo al pastor, para dejarle la mochila de nuestros pecados y decirle: ¡ Lo siento mira toda la porquería que traigo en esta mochila y ya no puedo más con ese peso, por favor quitamela! .... ¡La segunda semana de Adviento! ¡Es tiempo de conversión y de volver a la casa del Padre! ¡Que así sea para todos! Amén.  ¡Feliz día! ¡Besos y abrazos DE COLORES!

Pd: Y no olvidéis nunca que cualquier semilla puede ser el origen de un bosque, (si Dios lo quiere).

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