EVANGELIO DEL VIERNES 26.7.2019 AD:
V 26. "La dicha de ver y oír a Dios Encarnado". (Mt 13, 16-17):
¡¡¡Buenos días hermanos!!! Hoy se nos invita a encontrarnos con Dios en la lectura del Santo Evangelio de Nuestro Señor Jesucristo según San Mateo (Mt 13, 16-17), que no por ser breve es menos importante, porque en él, Jesucristo, nos va a decir que Él es Dios Encarnado... ¡Casi nada! ¡Tres líneas que nos revelan que Dios se ha hecho Hombre para que nosotros podamos llegar a Él! ¡Qué nunca nos acostumbremos a tan grandioso milagro!
(1) "En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: (2) «¡Dichosos vuestros ojos, porque ven, y vuestros oídos, porque oyen! (3) Os aseguro que muchos profetas y justos desearon ver lo que veis vosotros y no lo vieron, y oír lo que oís y no lo oyeron.»".
(1) "En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos:"
Este es un mensaje de Jesucristo a sus discípulos más cercanos, porque es casi imposible que alguien que no haya dado antes el paso de Fe de reconocerse discípulo del Señor, pueda aceptar que no sólo es Maestro, sino que es Dios,...
Y es que siempre, en esta vida, necesitaremos los cristianos de la Fe (en el siglo I y en el XXI)...
Hoy en día: para poder creer que Jesucristo es el Señor, y comenzar a hacer una vida de oración sin poder verle con nuestros ojos, ni oírlo con nuestros oídos... ¡Necesitamos de la Fe! (Aunque otras potencias vengan en nuestro auxilio, la razón, nuestras interioridades, etc...).
Luego la vida de oración y ver como el Señor nos va sanando y librando de pecados que parecían que nos tenían esclavizados por completo nos irá ayudando a darnos cuenta del inmenso poder sanador de Dios, y nos dará certeza de su presencia en nuestras vidas,...
Pero en el siglo I también les fue necesaria la Fe, (e incluso a veces pienso que en ocasiones más que a nosotros porque los prejuicios que podían tener eran mayores), para creer que el hijo de un carpintero podía ser el Mesías, que Dios podía tener callos en las manos, que sudaba como nosotros, que reía y que lloraba como nosotros,... ¡Porque Dios Encarnado fue mucho más humano que nosotros! ¡Para aceptar eso era necesario tener mucha Fe!
Pero claro, luego cuando le escuchaban hablar y veían sus milagros, ya les daba igual quién era su padre y en que trabajaba, y veían claramente que ese poder sólo podía venir de Dios,... (¡Estos testigos sí tenían más ventaja que nosotros! ¡Y yo no puedo ni imaginar como sería de sanadora la mirada de Jesús!)...
(2) "«¡Dichosos vuestros ojos, porque ven, y vuestros oídos, porque oyen!"
Estas palabras son totalmente verdaderas,... ya las separemos del sentido global del texto, o incarnadas en él... ¡Son totalmente ciertas en ambos casos!
¿Somos conscientes de lo dichosos que somos sólo por tener ojos para ver y oídos para oír? ¿Nos damos cuenta del milagro que suponen? ¡Sí! ¡Somos tremendamente dichosos y afortunados por nosotros mismos! (El problema es cuando la publicidad nos convence de que para ser dichosos necesitamos tener un determinado coche, una casa lujosa o una mujer o un hombre espectacular al lado,... ¡Entonces nos crean expectativas, que si no podemos cumplir nos generan frustración e infelicidad!).
Pues Jesucristo hoy nos lo dice: ¡Somos dichosos! Y no por todo lo material que poseamos, sino porque en esta vida lo más importante es gratis,... ¡y si no es gratis es que no es auténtico ni importante y no puede dar la felicidad!
Y ya que hablamos de felicidad: ¡El pecado no da la felicidad! No puede darla, porque Dios es la Fuente de la felicidad, y el pecado nos aleja de Él,...
Y según Víctor Frankl, la felicidad no se puede encontrar buscándola egoístamente, sino al dar a los demás lo mejor de nosotros mismos, y al entregarnos por un bien superior,... ¡Curiosamente esto es a lo que Jesucristo nos invita! ¡¡¡A servir a los demás!!! Y os recomiendo leer su libro: "El hombre en busca de sentido". (Aunque este autor no es católico, sino judío, uno de nuestros hermanos mayores en la Fe).
(3) "Os aseguro que muchos profetas y justos desearon ver lo que veis vosotros y no lo vieron, y oír lo que oís y no lo oyeron.» ".
Y esto me intriga,... ¿Qué puede ser eso que los apóstoles y los discípulos ven y oyen y que sin embargo no pudieron ver muchos profetas y justos?
Para eso podemos repasar lo que vieron y oyeron algunos profetas. Por ejemplo Abraham, Samuel e Isaías, y otros muchos profetas, hablaron con Dios y le escucharon. Y Moisés fue aún más allá oyó a Dios y habló con Él, e incluso le pudo ver... ¡Luego sólo se me ocurren dos opciones!
1º Al decir "muchos" profetas esta excluyendo a todos los que ya he citado.
2º. La que me parece más correcta, no se está refiriendo sólo a que ellos vieron y hablaron con Dios... (Pues tanto profetas, como Apóstoles lo han hecho).
Entonces, ¿Qué han visto los Apóstoles que no vieron los Profetas? Pues para mí está claro: ¡¡¡A Dios Encarnado!!!
Y esto no hay que interpretarlo como un mérito y un logro personal, que tuvieran los Apóstoles y no los profetas,... ¡NO! A los profetas les habría gustado ver y oír a Dios Encarnado, porque eso significaría que estaban siendo testigos de que la Redención de Dios había llegado a los hombres, de que el Mesías estaba ante ellos, de que Israel ya tenía a su esperado Salvador,...
Y el Señor les está invitando a detenerse un momento y a reflexionar sobre lo dichosos que son por poder verle, por ser colaboradores de Jesucristo, por ser una de las columnas de Su Iglesia,...
Es como si les dijera: "Pararos y momento y mirar. Yo soy Dios y cuento contigo. Vosotros podéis verme y oírme y yo confío en todos y cada uno de vosotros para que el Reino de los Cielos se extienda en esta tierra"...
¿A qué sería muy bonito que el Señor nos dijera estas palabras a nosotros? ¿A qué sería un verdadero sueño? ¡Pues el sueño se ha cumplido! ¡Porque Jesús también nos dice estas palabras a ti y a mí, así que podemos volver a leerlas sabiendo que el Señor no las dice, llamándonos por nuestro nombre y mirándonos a los ojos,... ¡¡¡Bendito sea siempre!!!
+ Hoy me gustaría que la oración fuera sólo de admiración y de Acción de Gracias, porque Dios se ha hecho Hombre, y porque podemos oírle (leerlo) y cuenta con nosotros,... ¡¡¡Qué bonito regalo!!! Y sólo se me ocurre corresponder como repetimos en cada Misa: "Te damos gracias, Señor, porque nos haces digno de servirte en tu presencia."
Y seguimos tras 206 días con el Libro de la Sabiduría, que nos exhorta a buscar la sabiduría de Dios, y que sigue con el discurso de Salomón, sobre la Sabiduría, su historia y sus frutos, y cuenta ahora como Dios, que podría mandarnos toda clase de males a los pecadores, sin embargo tiene misericordia. (Hoy 12, 16):
"Porque tu fuerza es el principio de tu justicia,
y el ser Tú Señor de todo
te hace ser indulgente con todo."
¡Feliz y Santo día hermanos! ¡Besos y abrazos DE COLORES!!!
Pd: Y no olvidéis nunca que cualquier semilla puede ser el origen de un bosque, (si Dios así lo quiere)... ¡¡¡Esparcid Sus semillas!!! ¡No os las quedéis sólo para vosotros!
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Así que os informo de que no uso más cookies que las galletas de comer,... Lo que use google no lo sé, pero seguro que es legal. Y yo no uso nada más,... :) ¡Ya estáis avisados! ;) ...
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