El Evangelio del día. El comentario sin pretensiones de un católico de a pie.: SÁBADO 21.9.2024 AD: "¡San Mateo, Ora Pro Nobis! " (Mt 9, 9-13):

EVANGELIO DEL JUEVES 21.9.2024 AD:

X 21. "¡San Mateo, Ora Pro Nobis! " (Mt 9, 9-13):

¡¡¡Buenos días hermanos!!! Se nos invita a estar con Dios en el Santo Evangelio de Nuestro Señor Jesucristo según San Mateo (9, 9-13).

Cada uno que escribe tiene un cariño especial a algún escrito, yo tengo mucho cariño a la: "Entrevista a San Mateo" que, reeditada, es la base del mensaje de hoy. Os invito a leerla y a disfrutar, sin vértigo, del salto al vacío que dio en el siglo I un recaudador de impuestos, que tras encontrarse con Cristo cambió por completo su vida, hasta convertirse en uno de los Doce Apóstoles de Nuestro Señor, a Él el Honor y la gloria por los siglos de los siglos, y aún después de todo tiempo... ¡Amén!

Cómo siempre pidamos Su LUX al Señor: ¡¡¡Ven Espíritu Santo!!! ¡¡¡Ven Espíritu Creador!!!

(0) "(1) En aquel tiempo, vio Jesús al pasar a un hombre llamado Mateo, sentado al mostrador de los impuestos, (2) y le dijo: "Sígueme." (3) Él se levantó y lo siguió. Y, estando en la mesa en casa de Mateo, muchos publicanos y pecadores, que habían acudido, se sentaron con Jesús y sus discípulos. (4) Los fariseos, al verlo, preguntaron a los discípulos: "¿Cómo es que vuestro maestro come con publicanos y pecadores?" (5) Jesús lo oyó y dijo: "No tienen necesidad de médico los sanos, sino los enfermos. Andad, aprended lo que significa "misericordia quiero y no sacrificios": que no he venido a llamar a los justos, sino a los pecadores."

(0) ¡Hola, soy Leví! (Mejor dicho, fui Leví, aunque yo mismo no quise poner mi primer nombre en el Evangelio, porque si uno descubre al Señor, el pasado parece un mal sueño. Y hoy, por Gracia y Misericordia de Dios, soy y seré para siempre aquel a quién llamáis San Mateo...

¡Parece que fue ayer y han pasado más de 20 siglos! No os preocupéis que os hablaré del día del Evangelio de hoy, pero antes quiero ir un poco más atrás...

Yo soy hebreo, mis padres fueron buenos y piadosos. ¿Podrían haber sido mejores? ¡Esa es una pregunta estéril! La pregunta acertada es ¿puedo yo ser mejor? Y yo ya no puedo, ni lo necesito, ¡porque estoy junto a Dios! ¡Vosotros Sí estáis a tiempo de crecer y mejorar!

Crecí viendo y viviendo las tradiciones de mi pueblo y las cumplí, año tras año, hasta que el calor infantil se apagó. Fui creciendo en conocimiento humano, fuerza y vigor... ¡pero no en sabiduría! (¡La sabiduría sólo viene de Dios!). Un día tuve una oportunidad de tener un buen trabajo, que me haría más rico que mis padres y me posibilitaría vivir con lujos y sin trabajar tanto como ellos. Tenía un inconveniente, ¡Sería impuro para mi pueblo! Pero al fin y al cabo ellos no habían hecho apenas nada por mi padres en toda su vida. Acepté el trabajo y con él me separé de Dios, (o al menos de Su Ley, la que nos dió Moisés...) ¡y en lo más hondo de mí también lo acepté!

Pero Dios es más grande que nuestro pecado y nunca me dejó. Crecían los lujos de mi casa y el vacío dentro de mí. A veces pensaba en mi niñez, cuando todo era puro. A veces me hubiera cambiado por mi padre por poder ir sólo una vez al Templo de Jerusalén. Pero creía que mi suerte estaba echada... ¡Condenado para siempre a una vida sin Dios, mientras el vacío crecía y crecía!

¡Pero todo cambió el día que vi al Rabí, y vino a mí! Me miró y me dijo "Sígueme". No me dijo ni porque, ni para que... pero vi en sus ojos Amor y PAX, ¡Dos cosas que jamás había sentido de verdad, o que al menos hacía mucho que no sentía! Y lo dejé todo y lo seguí... ¡¡¡Y fue lo mejor que hice en mi vida!!! ¡Él me liberó de mi vida cómoda y vacía y de mi pecado! Y con Él fui por muchos caminos: dormimos al raso, compartimos mesa y persecuciones...

¡Con Él compartí Su cruz y Su Gloria! ¡Ya en este mundo! Y ahora ya escapé del ensueño que llamamos vida y he llegado a Dios. Crucé la puerta que es la muerte y de nuevo oí la voz del Señor diciéndome: "¡Sígueme!". Me tomó de la mano y me llevó con mis padres al lado de nuestro Padre... ¡Ojalá pudierais ver la Gloria un segundo! ¡Toda vuestra vida cambiaría para siempre! Yo tuve la suerte de poderla ver en vida... ¡¡¡En los ojos del Maestro!!!

(1) "En aquel tiempo, vio Jesús al pasar a un hombre llamado Mateo, sentado al mostrador de los impuestos, ..."

Jesucristo, vio más que un recaudador de impuestos en su trabajo. No vio al Leví impuro y recaudador de impuestos, vio a San Mateo y como podía llegar a ser. Porque Dios no nos ve como somos, si no como podemos llegar a ser... ¡Cómo Él nos soñó! Así me vio y por eso me llamó.

Yo, Leví, era impuro e indigno para los hombres... ¡No para Dios! Aunque me había alejado de Él, Dios siguió siempre a mi lado. ¡Cómo está al lado siempre de cada uno de nosotros! Y nos invita a soñar, a crecer, a mejorar y a acercarnos a Él... ¡Dios siempre te espera! ¡Dios confía en ti, y en que un día irás a abrazarle! ¿Por qué no lo haces? ¿Qué te impide hacerlo? ¿Por qué ídolo barato y nocivo cambias el Amor Eterno de Dios?

(2) "y le dijo: "Sígueme."

El "Sígueme" de Jesucristo es universal y para todos. Se lo dijo a Leví, me lo dijo a mí, y se lo dice a cada mujer y hombre del mundo... ¡a todos! ¡Y a ti que lees esta reflexión también te lo dice: "Sígueme"

(3) "Él se levantó y lo siguió. Y, estando en la mesa en casa de Mateo, muchos publicanos y pecadores, que habían acudido, se sentaron con Jesús y sus discípulos. "

Yo, Leví, lo dejé todo y le honré con un banquete. ¿Hay mejor motivo de fiesta que un pecador vuelva al Padre? (Y no son palabras hechas, yo lo he visto... ¡¡¡No podéis imaginar la Alegría que hay en el Cielo cuando el que parecía perdido se convierte y regresa a la Iglesia!!!)

Yo, Leví, lo dejé todo y a partir de ese día seguí al Señor, que por Su Divina Gracia (y no por mis méritos) me convirtió en San Mateo: Apóstol, Evangelista, ¡y sobre todo Santo!

(4) "Los fariseos, al verlo, preguntaron a los discípulos: "¿Cómo es que vuestro maestro come con publicanos y pecadores?"

Los fariseos eran rápidos en condenar y lentos para Amar. ¡Por eso yo, un impuro publicano, les adelanté en un día! (Y lo mismo que Jesús no me rechazó, yo no rechacé a mis conocidos impuros y di todo lo que tenía para celebrar el día más feliz de mi vida: ¡¡¡El día de mi conversión!!!).

Y así, yo, hombre impuro, de vida turbia y alma llena de pecados y de corazón lleno de apegos, por Gracia de Dios conseguí ser un pobre puente que unió a muchos de mis seres queridos con Jesús. ¡A los que con libertad quisieron aceptarlo! ¡Y lo importante nunca es el puente, sino las dos orillas que une!

(5) "Jesús lo oyó y dijo: "No tienen necesidad de médico los sanos, sino los enfermos. Andad, aprended lo que significa "misericordia quiero y no sacrificios": que no he venido a llamar a los justos, sino a los pecadores."

Jesús, señala que su camino es ir a salvar a los pecadores, ¡qué son los que lo necesitan! Y a eso nos invita...

¡Siempre es tiempo de conversión! Cristo nos llama a cada uno, en el estado en que estemos a ir a él... ¿No le oís? Sí, su voz se oye a lo lejos mecida por el viento y viene a tí y te dice como me dijo a mí cuando estaba en la mesa recaudando impuestos: "Sígueme"...

Y, Cristo, nos hace una reflexión que debería herirnos: ¿de qué nos sirven las oraciones y sacrificios si nuestras entrañas están vacías de Misericordia? (Debemos tener Misericordia, si queremos que un día, Dios la tenga con nosotros...)

+ Hoy os invito a buscar los ojos del Maestro que os miran y os dicen"Sígueme"... Os invito a buscar los ojos del Maestro en otros hermanos, en los que os han precedido en el camino de la Fe, en los consagrados, o en el ultimo que acaba de llegar a la Comunidad, y, por supuesto, en los que lo dejaron todo por Jesús... Y en especial por los que más lo necesitan ahora: los enfermos, amenazados, perseguidos...

+ Y por los que están a punto de ser mártires y por los que están en las cimas de la santidad ya en esta vida. Porque el Señor les haga cada vez más santos y más fieles y sean nuestras luces para poder llegar al Padre. Y se lo pido a San Mateo en su día: "San Mateo, Ora Pro Nobis!"

¡Feliz y Santo día hermanos! ¡Besos y abrazos DE COLORES!!!

Pd: Y no olvidéis nunca que cualquier semilla puede ser el origen de un bosque, (si Dios así lo quiere)... ¡¡¡Esparcid Sus semillas!!! ¡No os las quedéis sólo para vosotros!