El Evangelio del día. El comentario sin pretensiones de un católico de a pie.: VIERNES 11.10.2019 AD: "¡El Reino de Dios ha llegado a vosotros!" (Lc 11, 15-26):

EVANGELIO DEL VIERNES 11.10.2019 AD:

V 11: "¡El Reino de Dios ha llegado a vosotros!" (Lc 11, 15-26):

¡¡¡Buenos días hermanos!!! Hoy se nos invita a encontrarnos con Dios en la lectura del Santo Evangelio de Nuestro Señor Jesucristo según San Lucas (Lc 11, 15-26). Una lectura en la que el demonio es mencionado varias veces, pero que eso no nos confunda, porque ¡el demonio nunca es el protagonista! ¡¡¡El protagonista siempre es Jesucristo!!! De nosotros depende apostar por el que ya vencido o hundirnos con el desgraciado que vivirá siempre lejos de Dios... (¡Qué Dios nos libre, con sus acciones, de tan terrible final!).

Y nosotros vamos a disfrutar de este nuevo encuentro con el Señor en Su Palabra: ¡¡¡Ven Espíritu Santo!!! ¡¡¡Ven Espíritu Creador!!! :

(1) "En aquel tiempo, habiendo echado Jesús un demonio, (2) algunos de entre la multitud dijeron:«Si echa los demonios es por arte de Belzebú, el príncipe de los demonios.» (3) Otros, para ponerlo a prueba, le pedían un signo en el cielo.
(4) Él, leyendo sus pensamientos, les dijo: «Todo reino en guerra civil va a la ruina y se derrumba casa tras casa. Si también Satanás está en guerra civil, ¿cómo mantendrá su reino? (5) Vosotros decís que yo echo los demonios con el poder de Belzebú; y, si yo echo los demonios con el poder de Belzebú, vuestros hijos, ¿por arte de quién los echan? Por eso, ellos mismos serán vuestros jueces. (6) Pero, si yo echo los demonios con el dedo de Dios, entonces es que el reino de Dios ha llegado a vosotros. (7) Cuando un hombre fuerte y bien armado guarda su palacio, sus bienes están seguros. Pero, si otro más fuerte lo asalta y lo vence, le quita las armas de que se fiaba y reparte el botín. (8) El que no está conmigo está contra mí; el que no recoge conmigo desparrama. (9) Cuando un espíritu inmundo sale de un hombre, da vueltas por el desierto, buscando un sitio para descansar; pero, como no lo encuentra, dice: "Volveré a la casa de donde salí." Al volver, se la encuentra barrida y arreglada. Entonces va a coger otros siete espíritus peores que él, y se mete a vivir allí. Y el final de aquel hombre resulta peor que el principio.»

(1) "En aquel tiempo, habiendo echado Jesús un demonio,

El Evangelio comienza con el Señor expulsando un demonio. Y es que la llegada del Reino de Dios nos ayuda a la vez sanándonos y expulsando nuestros demonios...

Y tanto es así, que la Ceremonia del Bautismo contiene un exorcismo. O sea que el bautizado queda libre de la acción de los demonios hasta que él libremente comience a abrirles puertas por el pecado... ¿De verdad que da igual bautizar o no? ¿De verdad que queremos dejar desprotegidos de los demonios a nuestros hijos hasta que ellos decidan si quieren o no bautizarse?...

Y ya para colmo de males se les deja sin bautizar y se les lleva a que les hagan reiki, y se les incita a celebrar Halloween... (El primero puede dar lugar a posesiones; lo segundo a un cambio de la escala de valores y a un culto encubierto al demonio. Porque por muy simpático que quiera parecer, sus realidades son terribles: las brujas son las esposas del diablo, en contraposición a las monjas que lo son de Cristo. Las doce de la noche es la hora bruja; opuesta a las doce del mediodía, la hora de la Madre de Dios. Las tres de la madrugada la hora del diablo, opuesta a las tres de la tarde, hora de la Divina Misericordia, en que Jesucristo murió por mis pecados... ¿A qué ya no es tan simpático que nuestros hijos jueguen con estas cosas?

¡SÍ! Jesucristo vino también para liberarnos de nuestros demonios, ... si le dejamos,... y no bautizar a los hijos no es ninguna broma... ¡Es una auténtica tragedia! ¡Es dejar morir de hambre su alma, amparados en que cuando son mayores ellos podrán alimentarla si quieren! ¡Una autentica tragedia!

(2) algunos de entre la multitud dijeron:«Si echa los demonios es por arte de Belzebú, el príncipe de los demonios.»

Y que el Señor expulse un demonio, que es algo muy bueno, para algunos es motivo de escándalo... Y acusan al Señor de ser cómplice de Belzebú, el príncipe de los demonios, y de que de él saca su autoridad de los demonios...

¿Por qué? Porque si aceptan que Jesucristo expulsa los demonios y cura con el poder de Dios, entonces van a tener que cambiar de vida, algunos drásticamente; y prefieren no complicarse y seguir pensando que es imposible cambiar. Pero, ¿Acaso el que expulsa demonios y sana no va a poder hacernos cambiar también a nosotros? ¿No va a poder expulsar también los demonios de nuestro interior? ¿Si tiene poder para lo difícil no lo va a tener también para lo fácil? ¿Qué hacemos, preferimos llamar ayudante del demonio al Salvador o aceptar Su salvación?

(3) Otros, para ponerlo a prueba, le pedían un signo en el cielo.

Y otros prefieren no rechazarle aún, y en vez de eso deciden pedirle otro signo mayor, un signo en el cielo...

Y nosotros, ¿No seguimos haciéndolo continuamente? ¿No le pedimos siempre más y más al Señor aún después de ver los milagros que ha hecho en nuestras vidas?... Y peor aún, ¿no terminamos acostumbrándonos a los milagros y llega un momento que nos saben a poco? (Pues convendría tener cuidado, porque eso mismo le pasó a un pobre desgraciado llamado Judas Iscariote,... y su final no fue muy bueno...).

Y es que se nos ha olvidado cual es el motivo de nuestra Alegría, que nos dijo el mismo Jesucristo en otro Evangelio: "No estéis alegres porque se os someten los espíritus inmundos, estad alegres porque vuestros nombres están inscritos en el Reino de los Cielos..." ...

Alguno podría pensar que él nunca ha sometido espíritus inmundos, pero ¿acaso no hemos sometido espíritus inmundos en el nombre de Jesucristo cada vez que con su ayuda hemos combatido un pecado y hemos vencido con Su Gracia? Y cada vez que vamos a confesarnos de nuestros pecados, ¿acaso no estamos expulsando a los demonios de nuestra vida y eligiendo la Vida Eterna al lado del Señor Jesús?

(4) Él, leyendo sus pensamientos, les dijo: «Todo reino en guerra civil va a la ruina y se derrumba casa tras casa. Si también Satanás está en guerra civil, ¿cómo mantendrá su reino?

La sabiduría de Dios les muestra que no sería lógico que el demonio se hiciera la guerra a sí mismo,... (Porque cualquier Guerra civil lleva a la destrucción del reino. ¡Y esto no debería olvidársenos nunca!

Y todas las guerras son malas, pero la peor es la guerra civil... ¡Qué peligrosos son los políticos que sólo buscan fracturar la sociedad civil! ¡Y que bien sirven al separador! (al diablo)... ¡Qué el Señor nos libre de ellos!

(5) Vosotros decís que yo echo los demonios con el poder de Belzebú; y, si yo echo los demonios con el poder de Belzebú, vuestros hijos, ¿por arte de quién los echan? Por eso, ellos mismos serán vuestros jueces.

Y aquí me he quedado sin saber que pensar...

El Señor dice que los hijos de aquellos que le acusan de trabajar para el diablo o que le piden signos serán sus propios jueces... ¡Porque ellos también expulsan demonios! ...

¿Qué demonios han expulsado ellos? Quizá sus propios demonios mediante el "exorcismo" de la conversión, de la oración, del ayuno, y de tener una relación de Amor con Dios... (Aquí habría que añadir los Sacramentos, pero ellos aún no tenían el inmenso regalo que nosotros Sí tenemos)...

Lo que sí está claro es con que poder lo hacían, porque sólo hay un poder capaz de expulsar demonios: ¡El de Dios!

Lo más probable es que el Señor se refiera a que sus descendientes sí aceptarán a Jesucristo, y por eso se convertirán en sus jueces indirectos, porque ellos sí fueron capaces de aceptar al Maestro sin verle, y ellos que le vieron le rechazaron...

(6) Pero, si yo echo los demonios con el dedo de Dios, entonces es que el reino de Dios ha llegado a vosotros.

Y aquí vemos que el Reino de Dios no sólo estaba cerca como Jesucristo anunciaba, sino que ya ha llegado. Porque el Reino no está donde está la Corte, sino donde está el Rey... ¡Y Jesucristo es el Rey de reyes, y el Señor de señores! ¡¡¡Porque Jesucristo es Dios!!!

(7) Cuando un hombre fuerte y bien armado guarda su palacio, sus bienes están seguros. Pero, si otro más fuerte lo asalta y lo vence, le quita las armas de que se fiaba y reparte el botín.

Aquí explica cual es el único poder que puede expulsar demonios: ¡El poder de Dios! ¿Y cuál es el poder de Dios sobre Belzebú y sobre todos los ángeles caídos? Pues un poder infinito, el que tiene el Creador sobre cualquier creatura... (siempre es bueno recordar que no hay dos dioses iguales, bien y mal, luchando entre sí. Eso puede pasar, aparentemente, en nuestro interior; pero sólo hay un Dios, y esta vida es sólo una prueba para manifestar nuestra voluntad de aceptar a Dios o rechazarle... ¡Pero Dios ya ha vencido!).

Y este párrafo nos invita a meditar ¿en qué armas estamos poniendo nuestra confianza? Convendría ponerlas en unas armas eternas y Todopoderosas que fueran siempre fieles, y no en pobres ídolos débiles que sólo nos esclavizan y nos van hundiendo, cada vez más,... (Y da igual como te veas, si estás leyendo esto no es demasiado tarde para ti... ¡Porque las fuerzas nos las dará Dios para que venzamos nuestros pecados! ¡Por muy mal que te veas, esclavo y lleno de vicios, el Maestro tiene un plan de salvación para tí y te sigue esperando! ...Y no porque sea un ingenuo, sino porque te conoce mejor que tú mismo y sabe de sobra que, con Su Ayuda y Su Gracia, puedes hacerlo! ¡¡¡Ánimo Dios cuenta contigo y apuesta por tí!!! ¡¡¡Levántante y vuelve a la Casa del Padre!!! ¡¡¡Aún es tiempo de Misericordia!!!).

(Y a mí me ayudó hacer un Cursillo de Cristiandad,... ¿Por qué no le regalas tres días a Dios?).

(8) El que no está conmigo está contra mí; el que no recoge conmigo desparrama.

Esta frase no se opone, como algunos dicen, a ese otro Evangelio, cuando San Juan y los Apóstoles quisieron prohibir a unos que expulsaban demonios en el nombre de Jesús que lo hicieran "porque no eran de los nuestros". Y el Señor les responde: "No se lo impidáis. El que no está contra mí, está conmigo"...

Serían opuestas si sacásemos las dos frases de su contexto (como hacen algunos para estudiar La Biblia, y estirarla para poder justificarse),... ¡Pero no lo son! Porque en el Evangelio de hoy Sí desparraman porque no sólo no expulsan demonios, sino que blasfeman contra quien los expulsa. Mientras que el otro día sí estaban recogiendo con el Señor, y están expulsando demonios en el nombre del Señor... ¡Y es que las aparentes contradicciones del Evangelio son más por nuestra dificultad de comprender que porque realmente las haya!

(9) Cuando un espíritu inmundo sale de un hombre, da vueltas por el desierto, buscando un sitio para descansar; pero, como no lo encuentra, dice: "Volveré a la casa de donde salí." Al volver, se la encuentra barrida y arreglada. Entonces va a coger otros siete espíritus peores que él, y se mete a vivir allí. Y el final de aquel hombre resulta peor que el principio.»

Y aquí va un mensaje de Jesús (en mi opinión) para los que han sido liberados del demonio (ya sea por exorcismos reales, que les han liberado de su posesión real; ya sea por su conversión que les ha liberado de ser sus esclavos) y no cambian de vida, y no vuelven al Señor y se convierten a Él por entero y empiezan una nueva vida junto a Él. Y avisa Jesucristo cual será su futuro: ¡terminarán mucho peor que antes! Porque la expulsión de los demonios si el liberado no acepta al Señor será completamente estéril y volverán. Cada liberación de una posesión demoníaca es temporal, mientras que tener el alma libre de pecados sin confesar tiene un valor eterno...

Y fue San Pío de Pietrelcina, quien dijo que una Confesión bien hecha tenía mayor poder contra el demonio que varios exorcismos, ... y él sabía mucho de luchar contra el demonio, y de confesiones y de exorcismos...

+ Hoy os invito a que oremos por todos los niños sin bautizar; por todos los poseídos por el demonio y por todos los que escuchan más a sus demonios y sus seducciones que a Jesucristo, que viene a liberarnos de ellos. Y porque el Señor nos libre a todos nosotros y a todo el mundo del mal y del maligno...

+ Y por todos los Cursillos de Cristiandad que se están celebrando este fin de semana, especialmente por el de Madrid... ¡Amén!

Y seguimos tras 283 días con el Libro de la Sabiduría, que nos exhorta a buscar la sabiduría de Dios, y nos habla de la Sabiduría, su historia y sus frutos, y lo absurdo que es adorar y construir ídolos en vez de amar y Adorar a Dios. (Hoy 17, 2):

"Estos malvados, que habían querido oprimir al pueblo santo,

yacían prisioneros de las tinieblas

y encadenados por una larga noche,

encerrados bajo sus techos,

excluidos de su eterna providencia."

¡Feliz y Santo día hermanos! ¡Besos y abrazos DE COLORES!!!

Pd: Y no olvidéis nunca que cualquier semilla puede ser el origen de un bosque, (si Dios así lo quiere)... ¡¡¡Esparcid sus semillas!!! ¡No os la quedéis sólo para vosotros!