EVANGELIO DEL MIÉRCOLES 29.9.2023 AD:
X 27. "...y fueron de aldea en aldea" (Lc 9, 1-6):
¡¡¡Buenos días hermanos!!! Hoy se nos invita a encontrarnos con Dios a través de la lectura, contemplación y meditación del Santo Evangelio de Nuestro Señor Jesucristo según San Lucas (9, 1-6). Y seremos dichosos si logramos ir configurando poco a poco nuestra vida a la Palabra de Dios... ¡¡¡Ven Espíritu Santo!!! ¡¡¡Ven Espíritu Creador!!! :
(1) "En aquel tiempo, Jesús reunió a los Doce (2) y les dio poder y autoridad sobre toda clase de demonios (3) y para curar enfermedades. (4) Luego los envió a proclamar el reino de Dios y a curar a los enfermos, (5) diciéndoles: «No llevéis nada para el camino: ni bastón ni alforja, ni pan ni dinero; tampoco llevéis túnica de repuesto. (6) Quedaos en la casa donde entréis, hasta que os vayáis de aquel sitio. (7) Y si alguien no os recibe, al salir de aquel pueblo sacudíos el polvo de los pies, para probar su culpa.» (8) Ellos se pusieron en camino y fueron de aldea en aldea, anunciando el Evangelio y curando en todas partes."
(1) "En aquel tiempo, Jesús reunió a los Doce"
Jesús, de entre sus discípulos elige a doce, para ser las Doce columnas sobre las que edificar su apostolado. Esta es la primera característica de la vocación: ¡Es el Señor quién llama! (No es el discípulo el que elige su lugar, sino Cristo... ¡Dichoso quién conozca Su vocación y la abrace con Fortaleza y perseverancia!)
Pero, aunque el Señor nos envíe no es garantía de triunfo... (Ni respecto a los demás, ni sobre nuestra perseverancia y santidad. ¡Porque Judas Iscariote fue también enviado! Por eso, como decía San Alfonso María de Ligorio, debemos pedir siempre al Señor la santidad y la perseverancia final...).
Vemos como esos Doce son los elegidos por el Señor y enviados. Después, los once que perseveraron (y el nuevo elegido) son de nuevo enviados, y a su vez irán enviando a otros Apóstoles suyos, siempre varones, a los que imponían a su vez las manos; y generación tras generación éstos a otros, y así ha llegado la sucesión apostólica por imposición de manos hasta hoy...
De aquí sale el "segundo apellido" de nuestra Iglesia Católica (Universal) Apostólica (porque viene de sucesión apostólica) y Romana (reconoce que el Obispo de Roma es el sucesor de San Pedro, y prima ante el resto para dilucidar algunas cosas de Fe).
Luego la Iglesia, al ver a los fieles laicos dormidos y que se nos olvidó que también somos discípulos de Cristo, nos recuerda que lo que el Señor pide también va con nosotros y nos invita a salir en misión...
(2) y les dio poder y autoridad sobre toda clase de demonios
A estos Doce Apóstoles les da poder y autoridad sobre toda clase de demonios. Luego, sus sucesores siguen teniendo este tipo de autoridad, si se transmitió correctamente las sucesión apostólica...
Es una autoridad para doblegar y expulsar a los demonios en el nombre de Jesucristo...
Hoy la Iglesia, tiene limitado este ministerio a unos presbíteros concretos que ejercen el ministerio del exorcismo (que existe, que es real y no son películas de miedo); y fuera de ellos nuestra acción contra el demonio se limita a la oración... (¡Y no es poco! Siendo las plegarias de liberación el máximo exponente...)
Al final las dos banderas tienen que chocar: La de Jesús y la del demonio. No pueden contemporizar, ni hay banderas intermedias. ¡Sólo dos! Así pues, conviene tener claro a cual servir y cual es ya la vencedora... (aunque a veces el mundo parezca otra cosa)...
Y cuando dice que les dio autoridad sobre toda clase de demonios, ¡quiere decir exactamente eso! ¡demonios! Ni virus, ni locura, ni enfermedad... ¡Quiere decir demonios! Y las palabras "sobre toda clase" refleja distintas clases y jerarquías de demonios...
(3) y para curar enfermedades.
Además de darles poder sobre los demonios les da el poder de sanación. (Totalmente diferente al anterior. No son sinónimos ¡Ni mucho menos!).
Y aquí termina el primero de los dos actos que realiza el Señor, y que consiste en darles Autoridad sobre demonios y enfermedades. (El primer acto es ungirles y darles estos dones; y el segundo es enviarles en misión).
(4) Luego los envió a proclamar el reino de Dios y a curar a los enfermos,
(1) "En aquel tiempo, Jesús reunió a los Doce"
Jesús, de entre sus discípulos elige a doce, para ser las Doce columnas sobre las que edificar su apostolado. Esta es la primera característica de la vocación: ¡Es el Señor quién llama! (No es el discípulo el que elige su lugar, sino Cristo... ¡Dichoso quién conozca Su vocación y la abrace con Fortaleza y perseverancia!)
Pero, aunque el Señor nos envíe no es garantía de triunfo... (Ni respecto a los demás, ni sobre nuestra perseverancia y santidad. ¡Porque Judas Iscariote fue también enviado! Por eso, como decía San Alfonso María de Ligorio, debemos pedir siempre al Señor la santidad y la perseverancia final...).
Vemos como esos Doce son los elegidos por el Señor y enviados. Después, los once que perseveraron (y el nuevo elegido) son de nuevo enviados, y a su vez irán enviando a otros Apóstoles suyos, siempre varones, a los que imponían a su vez las manos; y generación tras generación éstos a otros, y así ha llegado la sucesión apostólica por imposición de manos hasta hoy...
De aquí sale el "segundo apellido" de nuestra Iglesia Católica (Universal) Apostólica (porque viene de sucesión apostólica) y Romana (reconoce que el Obispo de Roma es el sucesor de San Pedro, y prima ante el resto para dilucidar algunas cosas de Fe).
Luego la Iglesia, al ver a los fieles laicos dormidos y que se nos olvidó que también somos discípulos de Cristo, nos recuerda que lo que el Señor pide también va con nosotros y nos invita a salir en misión...
(2) y les dio poder y autoridad sobre toda clase de demonios
A estos Doce Apóstoles les da poder y autoridad sobre toda clase de demonios. Luego, sus sucesores siguen teniendo este tipo de autoridad, si se transmitió correctamente las sucesión apostólica...
Es una autoridad para doblegar y expulsar a los demonios en el nombre de Jesucristo...
Hoy la Iglesia, tiene limitado este ministerio a unos presbíteros concretos que ejercen el ministerio del exorcismo (que existe, que es real y no son películas de miedo); y fuera de ellos nuestra acción contra el demonio se limita a la oración... (¡Y no es poco! Siendo las plegarias de liberación el máximo exponente...)
Al final las dos banderas tienen que chocar: La de Jesús y la del demonio. No pueden contemporizar, ni hay banderas intermedias. ¡Sólo dos! Así pues, conviene tener claro a cual servir y cual es ya la vencedora... (aunque a veces el mundo parezca otra cosa)...
Y cuando dice que les dio autoridad sobre toda clase de demonios, ¡quiere decir exactamente eso! ¡demonios! Ni virus, ni locura, ni enfermedad... ¡Quiere decir demonios! Y las palabras "sobre toda clase" refleja distintas clases y jerarquías de demonios...
(3) y para curar enfermedades.
Además de darles poder sobre los demonios les da el poder de sanación. (Totalmente diferente al anterior. No son sinónimos ¡Ni mucho menos!).
Y aquí termina el primero de los dos actos que realiza el Señor, y que consiste en darles Autoridad sobre demonios y enfermedades. (El primer acto es ungirles y darles estos dones; y el segundo es enviarles en misión).
(4) Luego los envió a proclamar el reino de Dios y a curar a los enfermos,
Y esta es su misión principal y la misión principal de la Iglesia: ¡¡¡Proclamar el Reino de Dios!!!
Después harán signos que muestran que estas palabras son ciertas, pero lo principal no es curar enfermos, ni echar demonios, etc. ¡Van a anunciar el Reino de Dios!
Y una Iglesia que se olvida de su misión, le está fallando a Cristo, que le envió justamente y sobre todo para esto. Y ya, después: "a curar a los enfermos... "
Hoy tenemos el Sacramento de la Unción de enfermos, que da siempre un sacerdote, y que es lo más importante que podemos hacer por nuestros enfermos graves o ancianos: Animarles a que lo reciban, para prepararles a llegar mejor al Padre, y la sanación es uno de sus posibles efectos, (temporal para que el enfermo disponga de un tiempo para ponerse en paz con Dios o definitiva, según Dios quiera...)
(5) diciéndoles: «No llevéis nada para el camino: ni bastón ni alforja, ni pan ni dinero; tampoco llevéis túnica de repuesto.
Para esta misión concreta el Señor les encarga que se fíen por completo de la Providencia de Dios, y no de cosas humanas. Que no lleven nada para el camino: ni bastón, ni alforja, ni pan, ni dinero, ni túnica de repuesto... ¡y que dejasen todo ello a Dios! ¡Que se fiaran de Él que siempre provee! Pero esto es lo que les pide que lleven para el camino, y para esa misión concreta durante un tiempo concreto. Porque en el Evangelio de San Juan, ya nos dice que Jesús y los Apóstoles llevaban una bolsa de monedas en común, que llevaba Judas Iscariote...
Y la Iglesia nos invita a vivir en Pobreza, es decir, con desapego total a las cosas de este mundo y a fiarnos de Dios, y no de nuestros ahorros y méritos que se pueden esfumar cualquier día (y sí lo harán cuando crucemos la puerta que es la muerte); y a ayudar con el dinero que ganamos a los que no tienen nada o están pasando una mala racha...
(6) Quedaos en la casa donde entréis, hasta que os vayáis de aquel sitio.
Esto les hará primero dejarse llevar por el Espíritu Santo, que les señalará el camino adecuado, y les evitará caer en favoritismos, en comodidades, lujos y otras preferencia humanas...
San Francisco de Borja, fue uno de los principales nobles de España, y al ver el cadáver de la reina Isabel al que acompañó en su última peregrinación en la tierra hasta su sepultura, y vio lo poco que le duró su inmensa belleza, dijo: "Jamás volveré a servir a señor que se me pueda morir". Años después terminó dejando las grandezas de la Corte e ingresando en la Compañía de Jesús, y sus propios compañeros se sorprendían como aceptaba sin protestar dormir en las fondas más ruines. Y cuando le preguntaban como él que había vivido siempre en el lujo podía aceptarlo, decía: "Siempre envío delante de mi un ángel a que me prepare mi habitación. Y cuando él me recuerda que el sitio que merezco por mis pecados es el infierno, cualquier aposento me parece lujoso en esta tierra..."
San Francisco de Borja tuvo la dicha de comprender que la mayor de las bellezas tiene una fecha de caducidad muy corta; que el mejor señor para servir es Dios, y que por muchos rigores y desgracias que nos pasen, si se nos tuviera que premiar según nuestros merecimientos... ¡todo nos iría muchísimo peor!
(7) Y si alguien no os recibe, al salir de aquel pueblo sacudíos el polvo de los pies, para probar su culpa.»
Aquí los Apóstoles, (cuando hagan esto y obedezcan al Señor, que es quién lo dice) no estarán condenando a nadie. Sólo respetan la libertad individual, y les dejan decidir libremente su futuro eterno. Y sólo dejan constancia de lo que han elegido, así lo que dejan atado en la tierra quedará atado en el Cielo... ¡Eternamente!
(8) Ellos se pusieron en camino y fueron de aldea en aldea, anunciando el Evangelio y curando en todas partes.
Y los discípulos escucharon la llamada y obedecieron, e irán de aldea en aldea anunciando el Evangelio y llevando la salud a un mundo enfermo, que ha perdido la paz por sus pecados...
Oremos por todos los enfermos de cuerpo, mente y alma, y porque el Señor nos agudize el oído y nos permita comprender cual es Su llamada para nosotros... ¡Y nos dé Fortaleza, constancia y la perseverancia final para poder cumplirla!
¡Feliz y Santo día hermanos! ¡Besos y abrazos DE COLORES!!!
Pd: Y no olvidéis nunca que cualquier semilla puede ser el origen de un bosque, (si Dios así lo quiere)... ¡¡¡Esparcid Sus semillas!!! ¡No os las quedéis sólo para vosotros!
Ysi no queréis dar el consentimiento a las cookies de google, con que no entréis en el blog estaréis a salvo de las malvadas cookies... (Si cuando me jubile me hago informático ya intento crear un enlace para que me déis vuestro consentimiento personalizado (y otro por si me queréis invitar a comer)... pero, mientras tanto, espero que con este mensaje cumpla las leyes de la U.E., de España, de internet y de los amigos de mantón de Manila... dicho sea con todo respeto y un poco de cansancio por tanto mareo... ¡Gracias!).
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