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domingo, 2 de octubre de 2022

LUNES 3.10.2022 AD: "Anda, haz tú lo mismo" (Lc 10, 25-37):

EVANGELIO DEL LUNES 3.10.2022 AD:

L 3: "Anda, haz tú lo mismo" (Lc 10, 25-37): 

¡¡¡Buenos días hermanos!!! Se nos invita a encontrarnos con Dios en el Santo Evangelio de Nuestro Señor Jesucristo según San Lucas (10, 25-37), y en él se nos dirá, ¡Nada más y nada menos!, qué hacer para heredar la Vida Eterna... 

¡Pues parece un tema muy importante! ¡Qué el Señor ponga PAX en nuestra alma y entendimiento en nuestra mente para poder comprenderlo y hacerlo vida! ¡¡¡Ven Espíritu Santo!!! ¡¡¡Ven Espíritu Creador!!! 

(1) "En aquel tiempo, se presentó un maestro de la Ley y le preguntó a Jesús para ponerlo a prueba: (2) «Maestro, ¿qué tengo que hacer para heredar la vida eterna?» (3) Él le dijo: «¿Qué está escrito en la Ley? ¿Qué lees en ella?» (4) Él contestó: «Amarás al Señor, tu Dios, con todo tu corazón y con toda tu alma y con todas tus fuerzas y con todo tu ser. Y al prójimo como a ti mismo.» (5) Él le dijo: «Bien dicho. Haz esto y tendrás la vida.» (6) Pero el maestro de la Ley, queriendo justificarse, preguntó a Jesús: «¿Y quién es mi prójimo?» (7) Jesús dijo: «Un hombre bajaba de Jerusalén a Jericó, cayó en manos de unos bandidos, que lo desnudaron, lo molieron a palos y se marcharon, dejándolo medio muerto. Por casualidad, un sacerdote bajaba por aquel camino y, al verlo, dio un rodeo y pasó de largo. Y lo mismo hizo un levita que llegó a aquel sitio: al verlo dio un rodeo y pasó de largo. Pero un samaritano que iba de viaje, llegó a donde estaba él y, al verlo, le dio lástima, se le acercó, le vendó las heridas, echándoles aceite y vino, y, montándolo en su propia cabalgadura, lo llevó a una posada y lo cuidó. Al día siguiente, sacó dos denarios y, dándoselos al posadero, le dijo: "Cuida de él, y lo que gastes de más yo te lo pagaré a la vuelta." (8) ¿Cuál de estos tres te parece que se portó como prójimo del que cayó en manos de los bandidos?»(9) Él contestó: «El que practicó la misericordia con él.» (10) Díjole Jesús: «Anda, haz tú lo mismo.»

(1) "En aquel tiempo, se presentó un maestro de la Ley y le preguntó a Jesús para ponerlo a prueba:"

Un maestro de la Ley se acerca a Jesús, no para aprender, sino a ponerlo a prueba. Lo que indica que ya le prejuzgó, y pensó que no es el Mesías, y sólo va a probarle, movido por la curiosidad, a ver porque ese trabajador manual causa tanto revuelo y han llegado a llamarle Maestro... 

¡Es una pena! Qué ya que da el paso de ir al Señor vaya con una mochila llena de vanidad, soberbia y prejuicios. En vez de ir con la mente y el corazón abiertos y que sea lo que Dios quiera ...
 
¡Y es aún mayor pena, que alguien tenga la inmensa soberbia de creerse tan elevado para poder juzgar a Dios! Y sino fuera algo tan frecuente, me parecería impensable. El problema es que por ser tan frecuente se nos puede pegar algo de este barro lleno de soberbia, y no creo que nos haga ningún bien intentar juzgar a Dios... ¡Al contrario! Así que prestemos atención para huir de tan funesto habito...

(2) «Maestro, ¿qué tengo que hacer para heredar la vida eterna?»

Y sin embargo, su pregunta es muy buena:

Se ve que algo bueno se le pegó de estudiar las Sagradas Escrituras, y va al grano con su pregunta. Es una pregunta que se combina con mi frase favorita de "Tres monjes rebeldes", la que dice Teodorico, el padre de San Roberto de Molesmes en su lecho de muerte: "Sólo hay un error que no podemos cometer en esta vida, el no ser santos.

Y entonces vendría la pregunta que hay que hacer al Señor: "¿Qué tengo que hacer para ser santo?" (La misma pregunta que le hace el maestro de la Ley, formulada de otra forma)... ¡Veamos que le responde!

(3) "Él le dijo: «¿Qué está escrito en la Ley? ¿Qué lees en ella?»"

Al Señor, siempre le interesa ver la sabiduría del interlocutor. (no su conocimiento humano, sino la sabiduría de Dios). Y como es un maestro de la Ley, por la Ley le pregunta. A ver que dice...

 (4) "Él contestó: «Amarás al Señor, tu Dios, con todo tu corazón y con toda tu alma y con todas tus fuerzas y con todo tu ser. Y al prójimo como a ti mismo.»"

Y el escriba le responde con la parte central del "Shemá" (quizá la principal oración hebrea), completada con otra sentencia... 

¡Y responde muy sabiamente! Es el Amor a Dios, que no es el amor por algo abstracto, si no que se manifiesta en nuestro Amor al prójimo, lo que nos permitirá alcanzar la Vida Eterna...

Y son necesarias las dos partes de la ecuación para salvarnos: Primero, Amar a Dios, y después Amar al prójimo como a nosotros mismos. No sirve Amar a Dios, y olvidarnos de los demás; ni olvidarnos de Dios y Amar a los demás. ¡La filantropía sin Dios es estéril! ¡Y la oración sin Caridad con el prójimo es mentira!

Y a Dios, no se le dan las migajas del Amor... ¡Eso no sirve! El Señor respeta nuestra libertad, pero si le aceptamos cada vez va ocupando más espacios en nuestro corazón, y como dice San Francisco de Sales, emerge de nuestro interior diciendo: "O Rey o nada"...

Y dice bien el Shemá la forma de Amar a Dios" con todo tu corazón y con toda tu alma y con todas tus fuerzas y con todo tu ser."

Y es que, el primer mandamiento es "Amarás a Dios sobre todas las cosas". Y no, como la gente se cree: "tendrás a Dios cariño..."

Edith Stein, que ya es Santa Teresa Benedicta de la Cruz, vio muy claro la relación entre ambos y sentenciará: "El Amor al prójimo es la medida de nuestro Amor a Dios"... ¡La gran filósofa alemana del siglo XX, que pasó de ser una atea de origen judío a monja carmelita, nos regaló un buen termómetro para que podamos medir el Amor que tenemos a Dios... a través del Amor que tenemos a los demás! 

Y aquí el escriba creo que se sale del Shemá (o es una parte que no me sé); pero ciertamente muestra que está lleno de la sabiduría de Dios: "Y al prójimo como a ti mismo.»"

(5) "Él le dijo: «Bien dicho. Haz esto y tendrás la vida.»"

Y el Señor le muestra que ha contestado bien, y que, al menos tiene claro por donde va el camino correcto, (porque otra cosa es llevarlo a la práctica, que es lo más difícil...). 

Y es un auténtico regalo, saber por boca del Señor que vas por buen camino. Porque si no basta sólo conocer el camino para llegar, es muy difícil llegar sin conocer el camino. (No digo imposible porque "para Dios no hay nada imposible").

(6) "Pero el maestro de la Ley, queriendo justificarse, preguntó a Jesús: «¿Y quién es mi prójimo?»"

Pero el maestro de la Ley ha venido a probar a Jesucristo, y hasta el momento sólo él ha sido probado por el Señor. Y vuelve a la carga preguntándole: «¿Y quién es mi prójimo?»"

Y es una buena pregunta en el contexto de un pueblo como el hebreo en el que muchas normas obligaban sólo respecto a los hebreos. Y así se prohibía prestar con interés a los hebreos (pero no a los gentiles). Y el Señor le va a aclarar muy bien su duda, con una historia que merece la pena leerla con atención y recreárla en nuestro interior:

(7) "Jesús dijo: «Un hombre bajaba de Jerusalén a Jericó, cayó en manos de unos bandidos, que lo desnudaron, lo molieron a palos y se marcharon, dejándolo medio muerto. Por casualidad, un sacerdote bajaba por aquel camino y, al verlo, dio un rodeo y pasó de largo. Y lo mismo hizo un levita que llegó a aquel sitio: al verlo dio un rodeo y pasó de largo. Pero un samaritano que iba de viaje, llegó a donde estaba él y, al verlo, le dio lástima, se le acercó, le vendó las heridas, echándoles aceite y vino, y, montándolo en su propia cabalgadura, lo llevó a una posada y lo cuidó. Al día siguiente, sacó dos denarios y, dándoselos al posadero, le dijo: "Cuida de él, y lo que gastes de más yo te lo pagaré a la vuelta."

Jesús usa una parábola para responderle: Un hombre es asaltado por unos bandidos, que le dejan medio muerto y desnudo al borde del camino. Por allí pasarán un sacerdote, y un levita, que darán un rodeo para no socorrerlo, y evitar "caer en impureza". Pero un samaritano, (que para los hebreos era incluso peor que un gentil, porque ni iban a Jerusalén en las fiestas señaladas y venían de un pasado de idolatrías), le cura y le lleva a una posada donde además pagará para que le cuiden...

Sus acciones dejan en entredicho la Fe del levita y el sacerdote: ¿Creen que Dios no se enterará de Su acción? Si es así, o no creen en Dios, o piensan que pueden desobedecerle sin que Él lo sepa...

Y dicha la historia dejará que sea el maestro de la Ley quién responda; y le preguntará:

(8) "¿Cuál de estos tres te parece que se portó como prójimo del que cayó en manos de los bandidos?»"

La pregunta tiene miga, porque si sigue la sabiduría de Dios tendrá que decantarse por un samaritano, con los que los judíos ni hablaban (como muestra la escena de la samaritana que se sorprende porque Cristo habla con ella en el pozo), antes que por dos miembros respetables de su pueblo...

(9) "Él contestó: «El que practicó la misericordia con él.»"

Pero el maestro de la Ley, contesta como Dios manda: «El que practicó la misericordia con él.»

Y se da cuenta que con esta misericordia, que se refleja en el Amor al prójimo, ha respondido su pregunta sobre que es lo que le hará a uno ser su prójimo... 

Además es una llamada en ver como nuestro prójimo a cualquier hombre, no sólo al que sea cristiano, hebreo o piense como nosotros...

Y es que tenemos el mismo peligro que uno que se cree demócrata porque hace de la democracia un ídolo al que dar culto, y eso convierte en un fanático de la democracia. Y cree  que por seguirla y servirla todo está justificado. ¡Este no es un demócrata sino idólatra y un fundamentalista! ¡Y cuánto más lejos llega creyendo servir a la democracia, más se aleja de ella!

Igualmente nosotros, si sólo ayudamos a los que piensan como nosotros y son de nuestra familia o Comunidad, haremos lo mismo que cualquier otra persona del mundo: atea o creyente... ¡Por eso en la Caridad debemos de dar el Amor de Dios, y no el nuestro que tiene muchos límites y prejuicios!

(10) "Díjole Jesús: «Anda, haz tú lo mismo.»"

Y esta es la frase que me parece más importante del Evangelio de hoy. Es una invitación directa a no quedarse en la teoría y a mojarse de verdad. A ser mediador y no intermediario... ¡Y es que Jesucristo siempre nos invita a ir más allá! (Nosotros que pensamos que hemos ido muy lejos porque estamos a 20 metros de la orilla, y el Señor siempre nos dice que vayamos más adentro... ¡Siempre más adentro!).

Y estas son sus palabras para nosotros hoy. Las mismas que le dijo al maestro de la Ley. No te quedes en la teoría, y haz de estas palabra Vida... ¡Este es el camino para alcanzar la Vida Eterna!

+ Hoy oremos por todos nosotros, esos sacerdotes y levitas que muchas veces pasamos de largo, desentendiéndonos de los problemas ajenos... Y por todos los samaritanos que entregan su tiempo y su dinero para socorrer a los que lo necesitan... Porque unos sumemos a la ecuación mucho más tiempo y Amor para el prójimo; y otros añadan mucho más tiempo y Amor para Dios... ¡Sólo así podremos alcanzar los dos la Vida Eterna!

Tras 963 días seguimos con el Libro del Sirácida o del Eclesiástico, que habla de el sabio. Hoy 39, 8:

"Hará brillar la doctrina recibida

y estará orgulloso de conocer la ley de la alianza del Señor.


¡Feliz y Santo día hermanos! ¡Besos y abrazos  DCOLORES!!! 

Pd: Y no olvidéis nunca que cualquier semilla puede ser el origen de un bosque, (si Dios así lo quiere)... ¡¡¡Esparcid sus semillas!!! ¡No os la quedéis sólo para vosotros!

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