Vistas de página en total

Vistas de página en total

miércoles, 22 de septiembre de 2021

JUEVES 23.9.2021 AD: "Y tenía ganas de ver a Jesús " (Lc 9, 7-9):

EVANGELIO DEL JUEVES 23.9.2021 AD:

J 23. "Y tenía ganas de ver a Jesús " (Lc 9, 7-9):

¡¡¡Buenos días hermanos!!! Hoy se nos invita a encontrarnos con Dios en el Santo Evangelio de Nuestro Señor Jesucristo según San Lucas (9, 7-9), al que vamos de la mano del Señor: ¡¡¡Ven Espíritu Santo!!! ¡¡¡Ven Espíritu Creador!!! 

"(1) En aquel tiempo, el virrey Herodes se enteró de lo que pasaba y no sabía a qué atenerse, (2) porque unos decían que Juan había resucitado, (3) otros que había aparecido Elías, (4) y otros que había vuelto a la vida uno de los antiguos profetas. (5) Herodes se decía: «A Juan lo mandé decapitar yo. (6) ¿Quién es éste de quien oigo semejantes cosas?» (7) Y tenía ganas de ver a Jesús."

(1) "En aquel tiempo, el virrey Herodes se enteró de lo que pasaba y no sabía a qué atenerse, ..."

En este párrafo me hacen gracia algunas cosas:

* Quizá Herodes "se enteró de lo que pasaba" (yo no lo creo), pero no se enteró de lo principal: ¡¡¡De Quién pasaba!!! ...

Dios NO es "algo tiene que haber". ¡¡¡Dios es alguien!!! Y porque es alguien y vino a nosotros, nosotros podemos llegar a Él...

Y lo lógico es que si Dios nos Crea, sin necesitarnos, lo hiciera sólo por Amor. Y sino nos Crea por Amor lo ilógico sería que no nos buscara y que no nos diera los medios para llegar a Él... 

Lo que es imposible para nosotros es llegar a Dios si Él no nos hubiera buscado antes. Por eso nos sigue buscando y llamándonos a todos ¡Por nuestro nombre!

*¿Virrey o títere de Roma? ... ¡Cuántos honores hay vacíos en este mundo como el de Herodes! Y que importante es recordar la sabiduría de Santa Teresa de Calcuta"No soy como yo me veo, ni como los demás me ven. Soy como Dios me ve!" ...


¡Qué triste debe ser morir como virrey, entre lujos terrenos y llegar al Reino de los Cielos y descubrir que los últimos son los primeros, y que no tienes muchas papeletas, en principio, de entrar en el Cielo... 

"No sabía a qué atenerse" pero no se preocupaba de ir a ver a Jesús en persona y oír sus palabras para saberlo... ¡Y por eso terminó sin saber a que atenerse! (Al menos esas eran sus excusas... ¡Porque Sí sabía a qué atenerse! ¡Porque San Juan Bautista se lo dijo, le había denunciado sus pecados e invitado a convertirse! Y su supuesta ignorancia era sólo una excusa para no tener que cambiar de vida).

(2) "...porque unos decían que Juan había resucitado"...

¡Impresionante! ¡Se pasan los profetas todo el Antiguo Testamento anunciando que va a venir el Mesías, y cuando viene preferimos pensar que resucitó El Bautista

Al final si uno no quiere ver es capaz de resucitar muertos y ver fantasmas para no abrazar la realidad. Parece uno de esos programas o revistas de parapsicología, que en vez de aceptar la Verdad Revelada, se ponen a hacer extrañas teorías de OVNIS, superhombres... ¡Y es curioso que la gente vea más sencillo cambiar la realidad entera que cambiarse a sí mismos! 

E imagino que mucha culpa de lo anterior lo tiene que intentamos cambiar primero por nuestras fuerzas antes de ir a Dios, (lo que es tan ilógico como esperar a curarse para poder ir al médico). E incluso, cuando por fin vamos a confesarnos, pensamos que vamos a poder cambiar sólo con nuestras fuerzas, (cuando el único que puede cambiarnos es el Señor, y para eso necesitamos estar unidos a Él todo lo posible, llevando una vida de oración y Sacramentos...). 

Y ante el fracaso personal del que intenta convertirse y cambiar hay tres posturas:

1ª. - La que nos llevará a la cima: Por muchas veces que caigamos levantarnos una y otra vez, e ir cambiando de hábitos y huyendo de las cosas que nos hagan caer. Ser humildes y reconocer que necesitamos la ayuda de Dios para poder crecer y cambiar.

2ª.- Aceptar con resignación que somos incapaces de cambiar, y darnos por vencidos. Creernos esa mentira del diablo de que unos nacen para santos y otros no... ¡Es una opción terrible, porque nos separa de Dios!

3ª.- ¡La peor de todas! Ante el fracaso personal uno intenta cambiar la realidad: y ataca a la Iglesia o sus instituciones, niega los mandamientos que no puede cumplir, o se dedica a buscar pecados ajenos para justificar los propios... Y luego se engañan pensando que no saben a que atenerse, como Herodes,... ¡Pero sí lo saben, por mucho que intenten olvidarlo!

Yo, particularmente, os recomiendo (e intento practicar) la primera y huir de las otras... porque me creó las palabras de Teodorico, el padre de San Roberto de Molesmes en su lecho de muerte: "Sólo hay un error que no podemos cometer en esta vida: ¡el no ser santos!".

(3) "...otros que había parecido Elías..."

¡Y éstos ya iban mejor encaminados! Porque sabían que Elías tenía que volver cuando viniera el Mesías. (Y recordemos que lo hizo, y vino junto a Moisés en el monte Tabor).

¡Pero les falta dar un paso más y tirarse a la piscina! (Qué es lo más fácil cuando uno está viendo milagros tan grandes)... 

Aunque a veces uno prefiere mirar a otro lado para evitar compromisos y se termina perdiendo lo más importante de la vida: ¡Encontrar nuestro Principio y Fundamento! ¡Encontrarnos con Dios para vivir en Él

Otras veces, los prejuicios y convencionalismos sociales pueden más que lo que vemos: ¡Cómo va a ser el Mesías un carpintero!


(4) "...y otros que había vuelto a la vida uno de los antiguos profetas."

 Cualquier excusa es buena cuando uno no quiere aceptar la realidad y descubrir a Jesucristo en su vida... ¡Ven más fácil que vuelva un profeta a la vida que que ya llegó el Mesías esperado! (Eso es que no esperaban mucho, o que esperaban con poca Fe).


(5) "Herodes se decía: «A Juan lo mandé decapitar yo."

Herodes usa la razón para quitarse de en medio la posibilidad de que sea San Juan Bautista. Pero, ¿lo consigue o su imagen vuelve avivando el fuego del remordimiento y haciéndole recordar que él mismo le mandó decapitar como vergonzoso y sangriento pago por una danza?

Porque el pecado no nos lo muestra Dios para poner límites a nuestra felicidad, sino para mostrarnos que hay cosas que nos hacen mal a nosotros mismos, por sí mismas y porque nos separan de Él: algunas hacen que nuestra llama se debilite (pecados veniales, que también son malos porque nos retrasan en llegar a Dios o nos impiden acercarnos más a Él) y otras que se apague del todo, (los pecados mortales, y de morir así, con pecados mortales sin confesar, nos autoexcluiremos para siempre del Reino de los Cielos... ¡Dios no lo quiera!). 

(6) "¿Quién es éste de quien oigo semejantes cosas?"

Sin embargo su curiosidad es estéril porque no le acerca a Dios, y no le hace salir de su palacio ni convertir su vida...

Pero esta pregunta pudo haberle salvado si se hubiera ocupado de intentar de verdad contestarla, con "determinada determinación" que diría Santa Teresa de Jesús...

Aquí el demonio consiguió sutilmente su objetivo, y seguro que le hizo abandonar estos pensamientos por cosas más mundanas y le invitó, por ejemplo, a dejar de pensar en eso y a ir a comer dátiles; y el "mañana le abriremos" del poema, por desgracia jamás se realizó... Y Herodes, quizá terminó cometiendo el único error que no debemos cometer en esta vida: ¡No ser santos! 

(7) "Y tenía ganas de ver a Jesús"...

¡Ganas que se dejó arrebatar por la pereza, por los placeres y seducciones del mundo, o por sus demonios!

Y esa es la diferencia entre voluntad y veleidad. Voluntad es aceptar algo y poner todas nuestras potencias al servicio de poder conseguirlo. Veleidad es querer algo, y no estar dispuesto a hacer nada por conseguirlo. (Y las ganas de ver al Señor de Herodes eran las de un veleidoso).

Pero Dios puede transformar al peor de los veleidosos en una persona voluntariosa... ¡Luego la excusa de: "Es que yo soy así" no sirve! ¡¡¡Porque Dios, como a San Mateo, nos ve como somos realmente (mejor que nosotros mismos), pero sabe como podemos llegar a ser!!!

+ Hoy me gustaría que nuestra oración fuera por todos los que también, como Herodes, tendrían hoy ganas de ver a Jesús, pero que no dan el primer paso... ¡¡¡Porque no esperen más!!!  ¿Por qué no intentar de verdad ver a Jesús, y transformar nuestras veleidades en hermosos frutos de voluntad!

 ¡Y esta es sólo una forma de poder ver a Jesús! ¡Ánimo y a no cometer el mismo error que Herodes! (El único error que podemos cometer en esta preciosa vida...).

+ Y ya que pedimos por los enfermos de alma, hagámoslo también por los enfermos de cuerpo y de mente,... ¡Porque el Señor les sane por completo, (si es Su Voluntad) y utilicen su Salud para alcanzar la Vida Eterna!

Tras 595 días sigue el Libro del Sirácida (o del Eclesiástico), en él habla la Sabiduría. Hoy 24, 33:


"Derramaré la instrucción como profecía,
y la transmitiré a las futuras generaciones."


¡Feliz y Santo día hermanos! ¡Besos y abrazos  DCOLORES!!! 

Pd: Y no olvidéis nunca que cualquier semilla puede ser el origen de un bosque, (si Dios así lo quiere)... ¡¡¡Esparcid Sus semillas!!! ¡No os las quedéis sólo para vosotros!


No hay comentarios:

Publicar un comentario