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martes, 15 de septiembre de 2015

15. "junto a la cruz de Jesús" (Jn 19, 25 - 27):

¡¡¡Buenos días hermanos!!! Hoy la lectura del Santo Evangelio de Nuestro Señor Jesucristo según San Juan (Jn 19, 25-27):
 
"En aquel tiempo, (1) junto a la cruz de Jesús (2) estaban su madre, la hermana de su madre, María, la de Cleofás, y María, la Magdalena. (3) Jesús, al ver a su madre y cerca al discípulo que tanto quería, (4) dijo a su madre: -«Mujer, ahí tienes a tu hijo.» (5) Luego, dijo al discípulo: -«Ahí tienes a tu madre.» Y desde aquella hora, el discípulo la recibió en su casa."
 
(1) " junto a la cruz de Jesús"
 
¡Qué verdad y que mentira más grande! Porque SÍ podemos decir que la cruz era de Jesucristo, puesto que la había tenido que llevar hasta el Calvario y había sido atravesado en ella... ¡Luego se había ganado humanamente el "derecho" de llevarla! (Porque como Dios verdadero ya tiene derecho sobre absolutamente todo lo que hay en el universo, puesto que es suyo.) ...
 
... Pero a la vez que mentira más grande, ... ¡Porque la cruz era nuestra! ¡La Cruz fue fruto de mi pecado y desobediencia y de la de cada uno de nosotros! Así que, ¡la cruz en verdad era nuestra! ¡La Cruz era en verdad mía! ...
 
... Y es que así es Dios: nos ayuda a llevar nuestras cruces (que Él no nos envía, sino que nosotros nos fabricamos), y se deja clavar en una por Amor a nosotros,...
 
... Y aunque Él lo hace todo quiere seguir contando con Su creatura, e incluso para llegar al Calvario, quiso dejarse ayudar por Simón de Cirene,...
 
... Y me imagino a Simón, pensando en la mala suerte que había tenido, y en la cruz que le había tocado llevar... ¡Seguro que pensaba que no era suya! ¡Y sin embargo lo era! ¡Claro que lo era! ¡De él y de todos nosotros! Pero lo mismo nos pasa a todos con las cruces que llevamos en nuestra vida, que en la inmensa mayoría de las ocasiones nos las hemos construido nosotros,... (Y quien no lo crea que recuerde el Salmo : "Porque ningún hombre vivo es inocente frente a "...).
 
(2) Y es que ¡la Fiesta de hoy era inevitable!... Si ayer celebrábamos la Exaltación de la Santa Cruz, (en la que, por supuesto, no celebramos la gran idea que tuvo el que creó este instrumento de tortura y muerte; sino el Amor que nos tiene Jesucristo,  que allí se sacrificó y murió,... ¡Cómo paso necesario para Su Resurrección Gloriosa!), es normal que como estela brillante, hoy celebremos y rindamos homenaje a Santa María, que vivió en el corazón su sacrificio, sin llegar a morir médicamente, a los pies de la Cruz,...

... ¿Cuánto sufriría María a los pies de la Cruz? ¿Cómo se puede soportar tan gran dolor? ...

... Y qué bonito es que el Evangelio comience por las mujeres, por las que menos contaban para la sociedad,... ¡Pero, sin embargo, eran las que más contaban para Dios! ...

... Y me reconforta saber que Jesucristo no estuvo solo al morir en la cruz,... ¡varios valientes le acompañaron!... ¿Y yo? ¿Y tú? ¿Seremos lo suficientemente valientes para estar fielmente a los pies de la Cruz? O mejor aún, ¿seremos capaces de Amar tanto como para ir a los pies de la Cruz?

(3) Jesucristo ve a Su Madre y a San Juan Evangelista,... ¡Y mucha atención porque Dios va a manifestarse ahora!
 
(4) "dijo a su madre : " Mujer, ahí tienes a tu hijo"..."
 
Y el orden de los factores aquí sí altera el producto...

... Porque primero le da a Santa María a San Juan, para que le cuide y le acompañe... Y con San Juan le da a todos los Apóstoles... Y a todos los discípulos... ¡Y a nosotros mismos! ...

... El Señor sabe que Santa María es poderosa ante Dios, y aún en medio del dolor ¡sabe que la Iglesia necesita a María! ...

... ¡Todos necesitamos a Santa María para que alumbre a Dios en nuestro interior; para que pise la cabeza de la serpiente dentro de nosotros; para que nos recoja a los pies de la Cruz y para que nos ayude a encontrar el camino para llegar a Dios! ...
 
(5) Y Jesucristo nos dice: "Ahí tienes a tu madre"...

... Luego ¿qué clase de cristiano es el que desobedece la última voluntad de Jesucristo en la cruz? ...

... Y si le da el Señor a Su Madre a San Juan, ... ¡Es que no tenía más hermanos! (Sino no habría tenido necesidad de decirle a que casa podía ir María desde entonces...) ...
 
Hoy os invito a orar porque se hagan realidad en nosotros, en todos los cristianos de la tierra y en todos los hombres del mundo las palabras finales de este Evangelio: "Y desde aquella hora, el discípulo la recibió en su casa"... ¡Porque si así lo hacemos Ella nos ayudará a llegar al Cielo! ¡Bendita sea siempre la siempre Virgen, y a la vez Madre de Dios Encarnado y Madre nuestra!
¡¡¡Santa María, Reina del Universo, Ruega por nosotros!!!
 

¡ Feliz día del Señor hermanos! ¡Besos y abrazos DE COLORES!
 
 Pd: Y no olvidéis nunca que cualquier semilla puede ser el origen de un bosque, (si Dios lo quiere).

 
EN ORACIÓN POR EL CURSO QUE COMIENZA, PORQUE APROBEMOS EN LA ÚNICA ASIGNATURA VERDADERAMENTE IMPORTANTE: ¡SER SANTOS!


DIÓCESIS DE ALCALÁ DE HENARES (MADRID, ESPAÑA):
Del 9 al 12 de octubre de 2015 AD - Cursillo nº 67 Mixto. Y Del 4 al 7 de diciembre de 2015 AD - Cursillo nº 68 Mixto. 


...Aparece este mensaje en mi querido blog:

"Las leyes de la Unión Europea exigen que informes a tus visitantes europeos de que usas cookies en tu blog. En muchos casos, dichas leyes también exigen que obtengas el consentimiento de los lectores. //  Hemos añadido un aviso a tu blog para explicar el uso que hace Google de ciertas cookies de Blogger y de Google, incluidas las de Google Analytics y AdSense.//  Es tu responsabilidad comprobar que dicho aviso se muestre y que sea adecuado para tu blog. Si utilizas otras cookies (al añadir funciones de terceros, por ejemplo), es posible que este aviso no te sirva. Más información sobre este aviso y tus responsabilidades."

Así que os informo de que no uso más cookies que las galletas de comer,... Lo que use google no lo sé, pero seguro que es legal. Y yo no uso nada más,... :) ¡Ya estáis avisados! ;)
 
 

2 comentarios:

  1. SEGUNDA LECTURA

    De los sermones de san Bernardo, abad (Sermón en el Domingo infraoctava de la Asunción, 14-15: OPERA OMNIA, edición cisterciense, 5 (1968), (273-274)

    LA MADRE ESTABA JUNTO A LA CRUZ

    El martirio de la Virgen queda atestiguado por la profecía de Simeón y por la misma historia de la pasión del Señor. Éste —dice el santo anciano, refiriéndose al niño Jesús— está puesto como una bandera discutida; y a ti —añade, dirigiéndose a María— una espada te traspasará el alma. En verdad, Madre santa, una espada traspasó tu alma. Por lo demás, esta espada no hubiera penetrado en la carne de tu Hijo sin atravesar tu alma. En efecto, después que aquel Jesús —que es de todos, pero que es tuyo de un modo especialísimo— hubo expirado, la cruel espada que abrió su costado, sin perdonarlo aun después de muerto, cuando ya no podía hacerle mal alguno, no llegó a tocar su alma, pero sí atravesó la tuya. Porque el alma de Jesús ya no estaba allí, en cambio la tuya no podía ser arrancada de aquel lugar. Por tanto, la punzada del dolor atravesó tu alma, y, por esto, con toda razón, te llamamos más que mártir, ya que tus sentimientos de compasión superaron las sensaciones del dolor corporal. ¿Por ventura no fueron peores que una espada aquellas palabras que atravesaron verdaderamente tu alma y penetraron hasta la separación del alma y del espíritu: Mujer, ahí tienes a tu hijo? ¡Vaya cambio! Se te entrega a Juan en sustitución de Jesús, al siervo en sustitución del Señor, al discípulo en lugar del Maestro, al hijo de Zebedeo en lugar del Hijo de Dios, a un simple hombre en sustitución del Dios verdadero. ¿Cómo no habían de atravesar tu alma, tan sensible, estas palabras, cuando aun nuestro pecho, duro como la piedra o el hierro, se parte con sólo recordarlas? No os admiréis, hermanos, de que María sea llamada mártir en el alma. Que se admire el que no recuerde haber oído cómo Pablo pone entre las peores culpas de los gentiles el carecer de piedad. Nada más lejos de las entrañas de María, y nada más lejos debe estar de sus humildes servidores. Pero quizá alguien dirá: "¿Es que María no sabía que su Hijo había de morir?" Sí, y con toda certeza. "¿Es que no sabía que había de resucitar al cabo de muy poco tiempo?," Sí, y con toda seguridad. "¿Y, a pesar de ello, sufría por el Crucificado?" Sí, y con toda vehemencia. Y si no, ¿qué clase de hombre eres tú, hermano, o de dónde te viene esta sabiduría, que te extrañas más de la compasión de María que de la pasión del Hijo de María? Éste murió en su cuerpo, ¿y ella no pudo morir en su corazón? Aquélla fue una muerte motivada por un amor superior al que pueda tener cualquier otro hombre; esta otra tuvo por motivo un amor que, después de aquél, no tiene semejante.

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  2. LECTURA BREVE 2 Tm 2, 10-12a

    Lo aguanto todo por los elegidos, para que ellos también alcancen la salvación, lograda por Cristo Jesús, con la gloria eterna. Es doctrina segura: Si morimos con él, viviremos con él. Si perseveramos, reinaremos con él.

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